LA RAZÓN 30/09/07
CARTA AL DIRECTOR
DOS CONSEJERAS, DOS SENSIBILIDADES
Don Manuel va a tener que hacer un reajuste de papeles entre los intérpretes de su obra “Andalucía imparable”. Los distintos grados de sensibilidad demostrados por dos de sus consejeras ante un mismo hecho, aconseja a que don Manuel introduzca un reajuste en su casting.
CARTA AL DIRECTOR
DOS CONSEJERAS, DOS SENSIBILIDADES
Don Manuel va a tener que hacer un reajuste de papeles entre los intérpretes de su obra “Andalucía imparable”. Los distintos grados de sensibilidad demostrados por dos de sus consejeras ante un mismo hecho, aconseja a que don Manuel introduzca un reajuste en su casting.
Me refiero a la sensibilidad demostrada, hace tan unos meses, por la Consejera de Obras Públicas doña Concepción Gutiérrez cuando la ciudadanía, capitaneada por Valencina Habitable, se opuso a que la proyectada autovía Salteras-Valencina-Camas pasara por medio de los dólmenes, especialmente muy cerca del de Montelirio. Doña Concha, tras reunirse con los movimientos ciudadanos, decidió desviar la autovía, por la parte baja, paralela a la vía del ferrocarril Sevilla-Huelva, lejos de los dólmenes.
Sin embargo la otra consejera, la de Cultura, doña Rosario Torres, que no ha dicho ni pío en este asunto, se supone que debería tener más sensibilidad que doña Concha a los temas de restos arqueológicos prehistóricos, que por lo que se ve, le importa un pimiento que justo al lado de donde se inicia el corredor de 36 metros del dolmen de Montelirio, se levante un edificio de dos plantas para un Supermercado y otros servicios, con unos 11 metros de altura, que a forma de pantalla, ocultará al completo el túmulo del monumento megalítico de cinco mil años de antigüedad, de tal forma, que se desde la rotonda de entrada a Castilleja de Guzmán, es decir, a algo más de cien metros del dolmen, los que ignoren donde está, preguntarán por donde se va al dolmen. Alguien tendrá que explicarle al turista que está ahí al lado, aunque no se vea, y que tome la primera calle a la izquierda, y luego otra vez la primera calle o callejón a la izquierda, por detrás del Super.
Lo dicho don Manuel, se impone un cambio de papeles, doña Concha ha demostrado que tiene mucha más sensibilidad para la cosa cultural, que doña Rosario con clara vocación agreste y de urbanismo salvaje, más propia para las obras públicas.
MANUEL R. DUARTE
VALENCINA (Sevilla)
Esta carta ha sido publicada por:
DIARIO DE SEVILLA 4 de octubre de 2007 aunque con el texto incompleto y con el título "Dos sensibilidades"
Sin embargo la otra consejera, la de Cultura, doña Rosario Torres, que no ha dicho ni pío en este asunto, se supone que debería tener más sensibilidad que doña Concha a los temas de restos arqueológicos prehistóricos, que por lo que se ve, le importa un pimiento que justo al lado de donde se inicia el corredor de 36 metros del dolmen de Montelirio, se levante un edificio de dos plantas para un Supermercado y otros servicios, con unos 11 metros de altura, que a forma de pantalla, ocultará al completo el túmulo del monumento megalítico de cinco mil años de antigüedad, de tal forma, que se desde la rotonda de entrada a Castilleja de Guzmán, es decir, a algo más de cien metros del dolmen, los que ignoren donde está, preguntarán por donde se va al dolmen. Alguien tendrá que explicarle al turista que está ahí al lado, aunque no se vea, y que tome la primera calle a la izquierda, y luego otra vez la primera calle o callejón a la izquierda, por detrás del Super.
Lo dicho don Manuel, se impone un cambio de papeles, doña Concha ha demostrado que tiene mucha más sensibilidad para la cosa cultural, que doña Rosario con clara vocación agreste y de urbanismo salvaje, más propia para las obras públicas.
MANUEL R. DUARTE
VALENCINA (Sevilla)
Esta carta ha sido publicada por:
DIARIO DE SEVILLA 4 de octubre de 2007 aunque con el texto incompleto y con el título "Dos sensibilidades"
EL MUNDO 12 de octubre de 2007 con el título "Las sensibilidades de dos consejeras"
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