Se acabó la fiesta
Hay listas electorales que parecen hechas
como si el candidato invitara a los concejales a una fiesta con
dinero público. Se incorpora a candidatos con el señuelo de que, de ganar,
tendrán un sueldo en el ayuntamiento. Después llegan las elecciones y la
necesidad de acuerdos para gobernar, dificulta que se pueda pagar, con el
dinero de todos, esos juegos políticos que se pactaron en la mediocre penumbra
de las asambleas locales del partido. En muchos pueblos de España estamos
viendo en estos días como hay responsables municipales que con un alto
sentido ético, ante la realidad social y política , limitan
sustancialmente sus sueldos . Dedican poco tiempo al debate sobre los
sueldos, y se sientan con otros a construir un proyecto de territorio. Pero también
vemos en otros lugares, alcaldes que se agarran a los dividendos económicos del
poder y dedican días, reuniones en la sombra y plenos, a la lucha por mantener
sueldos desproporcionados. Mi pueblo está entre los que lleva días paralizado,
bajo la preocupación de su responsable político por los sueldos: el de un
concejal al que pretende liberar, cuando conocía su incompatibilidad para ser
concejal y cobrar como empleado del ayuntamiento; y sobre todo el suyo propio
que intenta volver a subirlo. Como en la legislatura anterior, cuando ve que
las matemáticas postelectorales no se lo permiten busca una salida
desesperada a través de una puerta giratoria que le permita engrosar su sueldo.
Hay políticos que no entendieron que ya se apagaron las luces y
cesó la música. Habrá desbandada de políticos de paso, a los que
invitaron con dinero público. Se acabó la fiesta. Esperamos la sencilla,
cotidiana democracia.
Eduardo Pablo Apellaniz Bastero
ESTA CARTA AL DIRECTOR HA SIDO PUBLICADA EN:
ABC 15/07/2015
EL MUNDO 17/07/2015
DIARIO SEVILLA 17/07/2015
EL CORREO DE ANDALUCÍA 20/07/2015
ABC 15/07/2015
EL MUNDO 17/07/2015
DIARIO SEVILLA 17/07/2015
EL CORREO DE ANDALUCÍA 20/07/2015
No hay comentarios:
Publicar un comentario