Castilleja de Guzmán y su patente de corso urbanístico
El alcalde de Castilleja de Guzmán, D. Carmelo Ceba
Pleguezuelos, es todo un alcalde Erre que Erre. Se dice que el hombre es el
único animal capaz de tropezar dos veces con la misma piedra, y la escuela de
hostelería es, tras lo sucedido, como con el caso del dolmen de Montelirio, el
proyecto de la nueva variante de la A-8077, la adaptación a la LOUA de las
Normas Subsidiarias de planeamiento en su intento de cambiar la calificación de Especial Protección de los
suelos de la cornisa del Aljarafe siguiendo un procedimiento irregular y
la
pretensión de construir un Instituto de Enseñanza Secundaria en un ámbito
protegido - en suelo de relleno de escombros sobre el arroyo alfileres- , una
nueva piedra más con la que se ha estrellado en su eterno devenir urbanístico,
y aún así, sigue empeñado en darse nuevamente de bruces con ella. ¿Cual será la próxima Carmelo? ¿La del área
de oportunidad de uso hotelero del POTAUS dentro del entorno de protección
paisajística de los Jardines de Forestier, que son un Bien de Interés Cultural,
y que, de forma misteriosa e incomprensible, no han sido incluidos en el Parque
Cultural del Aljarafe? Menos mal que no hay más cosas en Guzmán que si no. . .
Eduardo Pablo Apellaniz Bastero
ESTA CARTA HA SIDO HOY PUBLICADA EN EL CORREO DE ANDALUCÍA CON EL TÍTULO "PATENTE DE CORSO URBANÍSTICO EN CASTILLEJA DE GUZMÁN"
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